viernes, 2 de mayo de 2014

Sentimiento en perspectiva

Pasa el tiempo, las estaciones, los caminos, los mensajes, los recuerdos, los pensamientos, las noches sin dormir pero algunas cosas quedan y muchas veces son las ganas, las no acciones y sobre todo los sentimientos. ¿Cuándo se terminan? Realmente no podría darles un inicio o final preciso, siento que pasa sin darnos cuenta. Me preocupan más los finales por que aunque se cierre el libro, la historia en nuestra cabeza sigue. Siempre hay algo que va más alla... La fuerza de las palabras, de los actos es maravillosa y muchas veces difícil de entender o asimilar. 
Me preocupa el transitar y cómo transitar el sentimiento, si lo veo en perspectiva lo veo finito, chiquito, pero ahí está, inamovible, como si fuera un nuevo ser en mi cuerpo. Lo puedo negar, lo puedo ocultar. La "desgracia" es que no lo puedo disfrutar porque es dolor y de lo contrario lo padezco. Caso contrario al amor. Aunque en el amor conviven todos los sentimientos y a veces habría que ponerse en perspectiva a los sentimientos y no ellos en perspectiva a nosotros. El último abrazo será el día que te deje de soñar, pensar y sentir. Y no lo veo de inmediato. Es verdad no hay que forzarse pero tampoco esta bueno vivir bajo presión. Los sentimientos van y vienen. Cuándo los tenemos impregnados en la piel es difícil borrar cualquier sensación y creo que cuando están lejos son un aprendizaje. Quizás deje de ser dolor, quizás no cicatrice, quizás me equivoque. Sentir nos hace más vivos. Ojala que ese punto de fuga gris se vuelva una perspectiva de felicidad. Si hay ganas de cambiar, nosotros  podemos ser el punto perspectiva. Disfrutar el momento y cuando haya que pasar el dolor hagamoslo, es un puente que hay  transitar para llegar a quien dice estar feliz. Es eso, perspectiva de un sentimiento.